Caso Chevron

Intento de rehabilitar al juez del caso Chevron se torna extraño

Businessweek - Paul M. Barrett 08/11/2013

En un procedimiento alucinante en el tribunal federal de Nueva York, Chevron intenta demostrar que el veredicto dictado en 2011 contra la petrolera, que la obliga a pagar $19 mil millones por contaminación en Ecuador, fue, en realidad, una estafa.

La empresa petrolera ha presentado esta semana evidencias inquietantes sugiriendo que el ex juez ecuatoriano, quien aseguró haber escrito la sentencia, en realidad no la redactó. Por su parte, los abogados que representan a los residentes de la selva tropical y que pueden beneficiarse de la sentencia, han querido rehabilitar a este ex magistrado. Sin embargo, el intento de rehabilitación nos les fue muy bien.

Nicolás Zambrano, el enfoque de casi tres días de interrogatorios a veces candentes, dio un performance que sólo puede ser descrito como estrafalario. Comenzó su testimonio el 5 de noviembre vestido con un largo abrigo gris carbón. Al día siguiente se había puesto una bufanda, guantes negros y un gorro de rojo brillante. En el gorro tenía bordado un par de ojos que dieron la impresión desconcertante de que Zambrano estaba mirando a sus interrogadores con cuatro ojos. Para ser justos, para un hombre acostumbrado a un clima ecuatorial, la temperatura en la sala del tribunal era fresca.

El nombre de Zambrano aparece como autor del dictamen de 188 páginas, escritas a renglón simple, de la Corte provincial de Lago Agrio, Ecuador, que sostienen que Chevron es el responsable por décadas de contaminación con hidrocarburos en la selva nororiental del país. Chevron alegó que Zambrano no había redactado la  sentencia de febrero de 2011, y que presto su firma a cambio de un esquema de soborno orquestado por el abogado neoyorquino  Steven Donziger.

La petrolera llamó a Zambrano como testigo hostil en un proceso civil que ha presentado contra Donziger y sus clientes ecuatorianos. El objetivo de este proceso ha sido desacreditar el juicio de Zambrano e impedir la aplicación de su sentencia. Donziger niega las acusaciones y argumenta que Chevron lo hace como parte de una estrategia para evitar los pagos por los pecados cometidos en Ecuador por Texaco, compañía que Chevron adquirió en 2001.

Randy Mastro, principal abogado de Chevron, fue exitoso esta semana al demostrar que Zambrano no parece saber mucho acerca de la decisión que supuestamente se le atribuye. Cuando se le preguntó, al ex juez ecuatoriano, éste no pudo nombrar los elementos clave de la sentencia, como son la poderosa sustancia cancerígena que se cita en ella, o un estudio científico fundamental que pretende vincular la contaminación por petróleo con las enfermedades humanas diagnosticadas. También tuvo problemas para explicar cómo fue capaz de utilizar elementos de la jurisprudencia francesa, americana y australiana si, como él mismo reconoció, no habla ni lee francés ni inglés.

Ayer, los abogados que representan a Donziger y sus clientes trataron de apuntalar la buena fe de Zambrano, quien insistió en que redactó las 188 páginas de la @@sentencia@@ con la única asistencia de su joven secretaria de 18 años de edad, que le tomó el dictado. También negó con indignación haber recibido propuestas para ceder frente a sobornos o para permitir que los demandantes ecuatorianos lo influyeran de alguna manera.

Los abogados de Donziger le preguntaron a Zambrano acerca de un precedente de la legislación ambiental que está citado en la @@sentencia@@ por $19,000 millones, dictada por la Corte Suprema de Ecuador en contra de Chevron. Zambrano tuvo dificultades para describirlo, aunque parte de esa confusión pudo relacionarse con el hecho de que fue interrogado en inglés a través de un traductor.

Después de su testimonio, el equipo legal de Donziger intentó explicar la importancia del precedente ecuatoriano, mientras que Han Shan, portavoz de Donziger, dijo en un correo electrónico que el precedente contiene "numerosas citas en inglés y francés del juicio del Dr. Zambrano en el caso de Lago Agrio", y agregó que, "esto contradice el falso éxito de Randy Mastro durante su ofensiva de preguntas al Dr. Zambrano, concebida para sugerir que el juez no podía haber accedido a dichas jurisprudencias, cuando la decisión del máximo tribunal de Ecuador ha sido expuesta tan claramente y a un alto nivel".

El problema con la explicación de Shan, fue que el propio Zambrano había ofrecido una descripción diferente de dónde y cómo se encontró con el idioma jurídico inglés y francés que desplegó en su @@sentencia@@ contra Chevron. El 5 de noviembre, Zambrano declaró que su secretaria de 18 años de edad, encontró los materiales legales extranjeros en varios sitios web, a pesar de que no habla ni lee bien el francés ni el inglés. "La joven que me ayudó a escribir la @@sentencia@@ era la única que navegaba en Internet", declaró Zambrano. Ella "eligió la opción español" en los sitios web, agregó. "Así es como yo me enteraba o informaba del tema en el que estaba interesado Ella los imprimía para que yo pudiera leerlos más tarde”.

Hay otros problemas con la explicación de Zambrano  de cómo redactó la enorme sentencia. El ex juez declaró, por ejemplo, que lo hizo en el espacio de unos tres meses, desde finales de 2010 hasta principios de 2011, tiempo durante el cual también leyó todo el registro con más de 200.000 páginas sobre el complicado caso, muchas de ellas consistentes de informes científicos altamente técnicos. Después de que Zambrano terminó de testificar ayer por la tarde, Chevron trajo a un @@perito@@ pagado, especializado en psicología del lenguaje, quien estimó que se necesitaría alrededor de un año y medio para que una persona sola pudiera leer un @@expediente judicial@@ de esa magnitud.

Hasta en asuntos pequeños e intrascendentales, Zambrano se contradijo en su testimonio con tanta frecuencia que, en un momento de ayer, el juez que preside este caso en Nueva York, Lewis Kaplan, observó con frustración evidente que el testimonio del ecuatoriano socavaba su propia narrativa de “manera absolutamente irreconciliable”. La opinión del juez Kaplan es sumamente importante porque el caso se está tratando sin un jurado. Donziger ha acusado reiteradamente a Kaplan de parcialidad a favor de Chevron, pero no ha logrado convencer a la corte federal de apelaciones de Nueva York para transferirlo a otro juez.

Además, está la curiosa salida de Zambrano del banco de jueces de su país. En febrero de 2012, el Consejo Judicial de Ecuador lo destituyó de su cargo porque liberó inapropiadamente a un narcotraficante que, en palabras del Consejo, "fue arrestado en flagrante delito por posesión ilegal de estupefacientes y sustancias psicotrópicas". La acción de Zambrano dio como resultado la fuga del acusado quien tuvo la oportunidad de "evadir el juicio", agregó el Consejo. El órgano judicial encontró a Zambrano culpable de actuar "con alevosía, negligencia manifiesta o error inexcusable".

A pesar de este contratiempo en su carrera, Zambrano explicó que durante esta primavera pudo conseguir un nuevo empleo como asesor legal en una refinería de la petrolera estatal ecuatoriana. El gobierno de Ecuador ha apoyado enérgicamente el juicio de Zambrano en contra de Chevron y condenó el intento de la compañía por evadir el pago del veredicto de 19 mil millones de dólares.

Se espera que continúe el testimonio cuando el caso reanude la próxima semana  en la corte de Nueva York.

Esta es una traducción no oficial realizada por Chevron. El artículo original en inglés puede ser visto aquí