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Siete huaos son procesados por un presunto sabotaje
El bus se detuvo frente a la Corte Provincial de Justicia de Coca, en Orellana. En su interior estaban siete personas de la comunidad huaorani. Un grupo de guías penitenciarios hizo un corredor para vigilar su ingreso al local.
Los familiares de los detenidos también estaban presentes. Los hombres fueron trasladados con esposas en sus manos. Cada uno fue acompañado por un uniformado hasta el primer tribunal de Garantías Penales. Allí estaba prevista la audiencia de calificación de flagrancia.
Ellos fueron acusados de participar en la toma de las instalaciones del Centro de Facilidades Petroleras de la compañía Petrobell, el miércoles. Son procesados por el presunto delito de sabotaje con paralización de servicios públicos.
Andrea Vargas, habitante de Bataboro (Pastaza) y esposa de Juan Bay, uno de los detenidos, contó que "la gente de Bataboro hizo un paro por plazas de trabajo y por la mala atención del agua". Por la demora en el cumplimiento de los ofrecimientos, los pobladores decidieron paralizar las actividades de la compañía. Según ella, ya habían llegado a un acuerdo cuando intervinieron los uniformados. "Los policías actuaron y los cogieron. Cuando eso pasó, la gente reaccionó", dijo al justificar los enfrentamientos.
Según el Ministerio de Defensa, 120 militares participaron en la recuperación de las instalaciones petroleras. Hubo seis heridos. "Se neutralizó la toma del lugar y se aprehendió a siete de los miembros de la comunidad huaorani causantes de la agresión", informó. Añadió que los comuneros estaban armados con lanzas, escopetas, revólveres y cerbatanas. Los soldados heridos fueron llevados hasta la casa de salud de la Brigada de Selva 19 Napo.