Caso Chevron

Total incoherencia

Hoy - Mauricio Pozo Crespo 02/12/2013

Realmente ya molesta la falta de sindéresis entre lo que dice y lo que hace el gobierno. Los ejemplos son varios pero uno reciente es el caso de la disputa legal entre los pueblos indígenas de la Amazonía y la empresa Chevron Texaco. Efectivamente nadie discute que se produjo un daño ambiental en la zona afectada. Desconozco así mismo que las reparaciones hayan sido completas o aún falte por hacer en la ecología de la zona. Sin embargo, ese es un problema entre dos actores: los indígenas afectados y la empresa anotada. ¿Qué tienen que ver en eso el Estado ecuatoriano y el Gobierno? No estoy en desacuerdo con que el Gobierno defienda a los ecuatorianos, por cierto, a todos, no solo a los que políticamente les conviene. Lo que me parece impresentable es que el Gobierno pase a opinar del tema y a publicitar con fondos del Estado en espacios políticos contratados en medios televisivos. Aparece una suerte de comercial con la firma de la Secretaría Nacional de Comunicación de la Presidencia de la República donde se hace toda una alharaca contra la empresa. El apoyo oficial debería ser mediante formas menos burdas, con gestiones externas, con más altura y estrategia, pues el acostumbrado estilo de atacar a la empresa es la mejor señal para la contraparte de la interferencia del Gobierno en la justicia. Es más, que el Gobierno diga a repetición que la justicia en el Ecuador sí funciona y es independiente y en forma paralela agreda a esa compañía muestra exactamente lo contrario. No solo hay que ser sino parecer. Hasta donde se conoce, ahora las probabilidades que el caso sea favorable a la empresa Chevron son mucho más altas que antes. Obviamente que no faltarán aquellos patrioteros que tilden de traidores a los que analicen con objetividad estos temas.

 

Otro caso es la última reclasificación a las universidades por parte de Consejo de Educación Superior, CES. Interfieren de manera brusca a los centros de educación superior exigiendo todos los requisitos habidos y por haber de personal docente con PHD’s, docentes a tiempo completo, refrendación de diplomas y títulos, etc. etc. ¿Cuál es la contraparte o el ejemplo por parte del Gobierno? Absolutamente lo contrario cuando el e ex presidente del Banco Central declara que falsificó su título académico de economista y el gobierno no hace nada. La afamada justicia “independiente” no se mueve un milímetro para ejemplarizar este malhadado y vergonzoso asunto. ¿Y ahora se atreven a calificar a universidades con notas de A, B, C o D sin dar ejemplo? ¿Qué universidades públicas cerraron antes de esta suerte de saneo que nadie sabe cómo lo hacen? Ninguna. Tanta mediocridad han tenido algunos centros privados como algunos públicos, sin embargo, el castigo va para unos no para otros.

 

Intervienen prohibiendo a los accionistas de bancos no tener acciones en otro tipo de negocios y el caso Cofiec, otra vergüenza, queda en el olvido. Cuando son los del Gobierno los infractores se lanza tierra encima cuando son opositores la justicia funciona a la perfección, es decir, al lado oficialista.